Colágeno: estas son las razones por las que deberías empezar a tomarlo
Jennifer Aniston, Madonna o Cameron Díaz entre otras, confiesan tomarlo. ¿Necesitas más razones para sumarte a esta tendencia? Te las damos.
El colágeno es la proteína más abundante de nuestro organismo. A medida que envejecemos, la capacidad de sintetizarlo disminuye y, en determinadas situaciones (sobrepeso, excesiva actividad deportiva,…), se acelera el desgaste. Por eso se recomienda ingerirlo como complemento a la dieta y ahí van un puñado de razones para no posponerlo demasiado.
1- No es fácil absorberlo en las comidas.
“Los alimentos que contienen colágeno se suelen descartar o se consumen en poca cantidad (piel y espinas de pescados, cartílagos en la carne, caldos, gelatinas…)”, afirma Mari Luz García Toro, directora de comunicación de Arkopharma que explica que el colágeno que ingerimos en los alimentos debe primero hidrolizarse, fraccionarse en aminoácidos, para absorberse y actuar en el organismo. “La piramide nutricional actual ya nos indica que en nuestra dieta son indispensables los complementos alimenticios”, apunta la doctora Sara Segovia, directora medica de Código372.
2- Nos aseguramos de tomar el adecuado.
No solo en cantidad; Mari Luz García Toro apunta 10 g como la dosis diaria recomendada. Sino en cuanto al tipo de colágeno. Se han descrito más de 20, siendo los más importantes el tipo I y tipo II. “El colágeno tipo I se encuentra mayoritariamente en huesos, tendones, córnea, discos intervertebrales y piel” enumera Mari Luz que explica que, la forma en la cual están agrupadas sus fibras, proporciona a los órganos que lo contienen, flexibilidad y resistencia al mismo tiempo. “El colágeno tipo II es el principal componente de los tejidos cartilaginosos, aunque también se encuentra en los discos intervertebrales y en diversas etapas embrionarias”, afirma la directora de comunicación de Arkopharma.
Meritxell Martí, farmacéutica y propietaria de Farmacia Meritxell (Andorra), añade que con los complementos de colágeno la dosis es mucho más elevada y eficaz que la que podemos ingerir con los alimentos y, además, nos aseguramos de que, el que tomamos, es el efectivo para lo que deseamos: “Generalmente tipo I y III para la piel, y tipo II para las articulaciones”.
3. ¿Tienes más de 25 años y/o eres deportista?
“A partir de los 25 años se empieza a perder un 1,5% por año de edad”, afirma la doctora Segovia que recomienda empezar a tomarlo ahí. “Ya no digamos a partir de los 40 que es cuando empieza el proceso de oxidación de nuestro cuerpo, entonces lo considero imprescindible”, declara. La ingesta de colágeno combate la flacidez, no solo del rostro, sino de todo el cuerpo. “Existen estudios que muestran que aumenta la densidad de las fibras de colágeno dérmico y ayuda a suprimir el daño que producen las radiaciones en la dermis”, asegura Mari Luz García Toro. Pero la mayoría de los estudios médicos publicados se refieren a su efecto en la degeneración del cartílago (artrosis). Meritxell Martí asegura que “el colágeno ayuda a mejorar también la masa muscular y a fortalecer todas las fibras alrededor de la articulación lo que contribuye a darle soporte y a que no se fuercen tanto”. Si, ademas, el producto contiene otros activos como ácido hialurónico, magnesio o cúrcuma, con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, mejorarán el cartílago y evitarán molestias por el desgaste o por el roce.
4- Otros beneficios demostrados
La doctora Sara Segovia, asegura que hay múltiples estudios médicos publicados que demuestran la eficacia de los complementos de colágeno tomados por vía oral, no solo en la piel (que incluye cabello y uñas), y las articulaciones, sino “también en ligamentos, humor vítreo, dientes y encias. Es el pegamento de nuestro cuerpo (su nombre proviene de colla y gemen) y nos proporcionara la fuerza y estructura para nuestros órganos”, afirma.
5- Previene y cura
La ingesta de colágeno puede prevenir la degeneración del cartílago y también pueden favorecer su regeneración, dependiendo del tipo de colágeno que contengan. “La edad, las lesiones o incluso el sobrepeso, ponen en marcha un proceso inmune contra el colágeno que se destruye y origina en el organismo un proceso inflamatorio. Aquí es donde tiene mucha importancia el colágeno tipo II puesto que a través del contacto en el intestino es capaz de neutralizar esta respuesta inmune y evitar la degradación del colágeno”, explica Mari Luz que asegura que su consumo diario favorece la eliminación del tejido dañado y su sustitución por material sano.
6- Suele ir muy bien acompañado
Los preparados farmacéuticos suelen contener en su fórmula otros ingredientes que mejoran la efectividad del colágeno “como el ácido hialurónico (tiene función estructural y aporta firmeza), la vitamina C (favorece la síntesis de colágeno), la glucosamina (que aporta elasticidad a las articulaciones)…”, enumera Mari Luz. Meritxell asegura que el que ella ha formulado “es un excelente complejo de suplementos nutricionales de origen natural, ademas de contener activos que evitan el acumulo de toxinas en el sistema digestivo que interfieren en la absorción de estos activos”, y apunta que mejora la luminosidad de la piel, la hidrata, evita la flacidez y contiene antioxidantes que la preservan del envejecimiento.
7- En seguida se notan los efectos
Aunque los beneficios de la nutricosmética se perciben más y mejor a largo plazo, la doctora Segovia asegura que con la ingesta de colágeno "notaremos en 10 días mejoría en el cabello y las uñas. En 2 o 3 semanas, en nuestra piel y, en las articulaciones, pasadas 6-8 semanas”. Meritxell asegura que desde el primer día se nota una mayor luminosidad y energía en la piel, a los 15 días se percibe más hidratada y elástica y en un mes se nota que mejora la firmeza.
8- No tiene contraindicaciones y es para toda la vida
A las dosis recomendadas, estos complementos no tienen contraindicaciones, “salvo alergias a alguno de los componentes del preparado”, asegura Mari Luz García Toro. Se puede tomar de forma continuada todo el tiempo que se desee. “Es como si nos gustara comer manzanas todos los días y nos preguntaran si se puede o se debe descansar”, ejemplifica Mertxell. La doctora Segovia recomienda tomarlo asiduamente “ya que está demostrado que al dejar de aportarlo durante 15 días nuestros niveles de colágeno empiezan a disminuir de nuevo”.